¿Existe alguna relación directa, bien sea positiva o negativa, entre la miel de abeja y la diabetes?
Si se hiciera una encuesta de gran escala, preguntando aleatoriamente a diferentes individuos qué es la miel, todos tendrían una respuesta similar, bien pudieran responder: la mies es un ingrediente, una sustancia o un almíbar dulce que producen las abejas.
Todos saben qué es la miel y esto se debe a que la misma ha estado en la vida gastronómica de los seres humanos desde hace al menos 200.000 años según los expertos.
Por esta razón existen tantas historias, mitos y leyendas que describen la miel como un elemento cargado de virtudes no sólo nutritivas sino también curativas.
Actualmente se ha incrementado la demanda de productos naturales, biológicos y orgánicos, por ello la miel ha cobrado popularidad como dulcificante natural y nutritiva, pero, ¿realmente es la miel dueña de todas las propiedades y beneficios que se le atribuyen? ¿Al ser un producto natural supera en valor nutricional a los edulcorantes artificiales? ¿Es la miel un alimento apto y por tanto recomendado para diabéticos?
Se podrán obtener estas respuestas una vez que se conozcan el origen, las características y sus variedades, su valor nutricional y sobre todo si la misma es apta para el consumo de las personas que padecen de una enfermedad metabólica cómo la diabetes.
¿Los diabéticos pueden comer miel?
La primera respuesta es NO, pero es necesario matizar esta respuesta ya que según recomendaciones de algunos endocrinólogos hay casos en los que sería posible su consumo:
- Haciéndolo de forma esporádica, en cantidades muy pequeñas y siempre que el paciente se encuentre sometido a una dieta sana y equilibrada.
- De forma excepcional, un diabético puede tomar miel en caso de hipoglucemia que es un estado de bajada de la glucosa en sangre, pero en este caso también sería en pequeñas cantidades y únicamente servirá para regular la bajada de azúcar.
Origen de la Miel
El uso y consumo de la miel es tan antiguo que es difícil datar donde fue que realmente fue encontrada por primera vez, lo cierto es que existe numerosa documentación de su existencia en las grandes civilizaciones de la antigüedad.
En efecto, conocidas son las pinturas rupestres de Bicorp y Dues Aigues, que siendo las pinturas rupestres más antiguas de la humanidad ya se representa en ellas la recolección de miel por los humanos. Cruzando un poco el globo terráqueo, en el Lejano Oriente, el dios Visnú fue representado como abeja sobre la flor de loto. También en la Biblia se pueden encontrar escritos acerca de la miel, lo cierto es que por sus propiedades y dulzura, la miel en diversas culturas era utilizada como ofrendas a los dioses y regalos muy preciados entre pares.
Desde el antiguo Egipto, pasando por Grecia hasta llegar a Roma en sus albores como Imperio la miel ha sido utilizada para curar y prevenir enfermedades e incluso como conservante. De hecho, el gusto de los romanos por la miel hizo que se extendiera su consumo por todas las zonas dominadas por su imperio hasta llegar a las mesas de los países posteriormente colonizados por los europeos.
Y aunque la miel fue bastante apreciada también fue casi extinta debido al alto consumo de azúcares refinados en la actualidad, sin embargo, gracias a todo el movimiento ecologista, la miel, como producto biológico ha venido ganando popularidad como endulzante y su consumo es cada vez más frecuente.
Características y producción de la Miel
La miel es una sustancia dulce y viscosa, la misma puede poseer una amplia gama de color, que va desde pardo oscuro hasta un color casi transparente, y esto se debe a las 320 variedades de mieles que existen. Así como su color, también varía su consistencia, que pudiera ser cristalizada, espesa o fluida; igualmente su aroma y sabor dependerá de la variedad de flores que las abejas visiten en su colecta de néctar.
Este alimento es producido por las abejas, específicamente la Apis mellifera, que van de flor en flor recolectando el néctar o ciertas sustancias producidas por otros insectos chupadores. Al chupar estos líquidos, los mismos pasan al aparato digestivo de las abejas, y es allí donde se combinan con enzimas que transforman la sacarosa de la sustancia inicial en fructosa y glucosa.
Posteriormente ese líquido es regurgitado por la abeja recolectora y va pasando de abeja en abeja para enriquecerse de más y más enzimas hasta que es depositado en pequeñas celdas del panal. Lo interesante de este proceso es que para que la miel se forme, toda la sustancia recolectada deberá ser deshidrata progresivamente, deshidratación que se consigue con la ventilación enérgica del batir de las alas de las abejas, pasando de un 70 u 80 % de humedad a un 16 o 18%, gracias a la evaporación del agua. Todo el proceso finaliza cuando la sustancia original se convierte en miel y las abejas sellan las pequeñas celdas para evitar la rehidratación del producto.
Valor Nutricional de la Miel
El aporte nutricional de la miel está básicamente centrado en sus carbohidratos, de hecho de los 100 gramos del producto, 75 gramos son azúcar de diferentes tipos. En líneas generales, según alimentos.org 100 gramos de miel contienen:
- Proteínas – 0,38 miligramos
- Fibra – 0 gramos
- Calorías – 302 kilocalorías
- Azúcar – 75, 10 gramos
- Fructosa – 38,80 gramos
- Glucosa – 33,90 gramos
- Sacarosa – 2,37 gramos
- Colesterol – 0 miligramos
- Minerales:
- Hierro – 1,30 miligramos
- Calcio – 5,90 miligramos
- Potasio – 45 miligramos
- Yodo – 0,50 miligramos
- Zinc – 0,35 miligramos
- Magnesio – 1,70 miligramos
- Sodio – 2,40 miligramos
- Fósforo – 4,90 miligramos
- Vitaminas:
- Vitamina B2 – 0,05 miligramos
- Vitamina B3 – 0,28 miligramos
- Vitamina B5 – 0,07 microgramos
- Vitamina B6 – 0,16 miligramos
- Vitamina B9 – 5 microgramos
- Vitamina C – 2,40 miligramos
- Vitamina K – 25 microgramos
Propiedades terapéuticas de la Miel
A lo largo de la historia del ser humano a la miel se le ha atribuido un cúmulo de propiedades, no sólo debido a su ingesta, sino también a su uso tópico, efectivamente, una de las propiedades más conocidas de la miel es su capacidad antiséptica, la cual unida a su propiedad emoliente hacen que sea un cicatrizante excelente y un dermoprotector eficaz, por lo que se usa tópicamente sobre quemaduras, grietas y heridas dando excelentes resultados.
La miel también es utilizada para combatir la laringitis y los resfriados puesto que se considera un tónico relajante. Otra de las propiedades que se le atribuye es su capacidad laxante. Puesto que es un eficaz emoliente, la miel es utilizada en una amplia gama de productos cosméticos. Incluso se utiliza en pacientes con intoxicación etílica para acelerar el metabolismo del alcohol en sangre, ya que el alto contenido de fructosa que posee así lo permite.
¿Tiene la miel la propiedad de controlar la diabetes?
Existen numerosas investigaciones al respecto del papel que desempeña la miel en relación al tratamiento de la diabetes, sin embargo, todos ellos apenas comienzan y no aportan del todo datos concluyentes. Sin embargo, se ha podido conocer de dichos estudios, que la miel resulta más tolerable para las personas que padecen de intolerancia a la glucosa que la mayoría de los edulcorantes artificiales o azúcares comunes.
Ahora bien, también se responsabiliza a la miel de producir hiperglicemia a corto plazo, pero ya que tiene un efecto mínimo sobre el incremento de la glucosa en la sangre, en contraste con otros azúcares refinados o edulcorantes artificiales, se recomienda por encima de estos últimos a las personas con diabetes.
¿Pueden las personas con diabetes consumir miel?
Aunque los azúcares no sean de alta prioridad dentro de una dieta saludable, está tan arraigado su consumo culturalmente, en especial en los países desarrollados, que la proyección del aumento de personas que padecen de diabetes a nivel mundial sigue en ascenso y parece imparable. Y aunque no solo el exceso del consumo de azúcar es responsable del desarrollo de la diabetes, ciertamente juega un papel crucial.
Por esta razón, se hace cada vez más crucial cambiar no sólo la dieta, sino también el estilo de vida sedentaria que lleva el ciudadano promedio.
En todos los casos, sean personas sanas o con diabetes, se recomienda limitar el consumo de edulcorantes, así sean naturales, como la fructosa o la sacarosa, ya que aunque son nutritivas, estimulan la acumulación de grasa en el abdomen y por supuesto el aumento de peso y aunque la absorción de la fructosa sea más lenta que el resto de los azúcares, se considera que la misma puede producir resistencia sobre la acción de la insulina en las células del hígado.
A pesar de ello, si la fructosa reemplaza a otros carbohidratos ayuda a un mejor control de la glucosa. En efecto, un dato interesante es que, en el caso de la fructosa que posee la miel, y conforme a los resultados obtenidos en algunos casos clínicos, la misma, tiene un bajo impacto en los niveles de glucosa en la sangre de los pacientes con diabetes tipo 1.
Esto se debe a que la miel incide sobre algunos efectos metabólicos como la dislipidemia, que engloba todos los desórdenes metabólicos que involucran las lipoproteínas y los lípidos, generando o disminuyendo el riesgo a sufrir enfermedades cardiovasculares; la disminución del estrés oxidativo; y la mejora de la resistencia a la hormona de la insulina.
Estos procesos metabólicos están enteramente involucrados con el padecimiento de la diabetes. De este modo, el beneficio de la miel de abejas para una persona que padezca de diabetes, no se limita al impacto sobre la glucemia, sino que los efectos de esta sustancia también inciden en el curso de la patología.
¿Son los endulzantes naturales mejor para los diabéticos que las opciones artificiales o procesadas?
No existen estudios que admitan que los endulzantes naturales como la miel, la melaza, el azúcar de coco, el azúcar de caña natural entre otros son más saludables que los edulcorantes creados en un laboratorio.
Aunque estos endulzantes naturales estén menos procesados, y contengan ciertas vitaminas y minerales, el azúcar no deja de ser azúcar y lo que se recomienda por la OMS es el consumo de 6 cucharaditas para las mujeres y 9 cucharaditas para los hombres, de todas las fuentes que se consuman a diario.
Por esta razón, el consumo de miel debe ser bien regulado, como si se tratara de azúcar blanco, efectivamente, la Asociación Americana de Diabetes, basada en estudios científicos, asevera que una persona que padece de diabetes, puede consumir tan sólo el 10% de azúcar de la totalidad de las calorías que han de consumirse durante el día, por supuesto guardando una dieta saludable e incluyendo en su rutina diaria la actividad física.
Podemos concluir que las personas que padecen de diabetes sí pueden consumir miel de abejas pero en cantidades limitadas, siempre y cuando su peso y su glicemia estén bien controlados.
Ni la miel, ni ningún otro azúcar son indispensables para el buen funcionamiento del cuerpo; a menos que se sufra una hipoglicemia repentina, de hecho, en estos casos la miel resulta muy útil, puesto que sus azúcares pasan directamente al torrente sanguíneo, normalizando así los niveles de glucosa.
El azúcar no es malo en sí mismo, sino el exceso de ella y ya muchos alimentos contienen azúcar, es por esta razón que se recomienda mantener bien reducido el consumo de azúcares añadidos, así provengan de fuentes naturales como es el caso de la miel de abejas, en especial si no se ha logrado tener un control estable de dicha enfermedad.
REFERENCIAS:
- https://abejas.org/productos-de-la-apicultura-la-miel/
- http://fmdiabetes.org/mitos-realidades-del-azucar/
- http://www.diabetesforecast.org/2016/jan-feb/es/5-cosas-que-debe-saber-sobre.html
- https://apiterapia.com.co/miel-y-diabetes/
- https://dulcesdiabeticos.com/miel-diabetes/
- https://www.laprensa.com.ni/2016/06/14/espectaculo/2051436-miel-de-abejas-y-diabetes
- https://es.wikipedia.org/wiki/Miel
- https://alimentos.org.es/miel
- https://www.universomiel.es/miel-y-diabetes/
- http://miel.org.es/miel-y-diabetes
- http://www.fundacionpediatricadiabetes.org/pub/Boletin%20Septiembre%202010.pdf
- https://nutricionsinmas.com/beneficios-y-advertencias-sobre-el-consumo-de-miel/
- http://www.dieteticasinpatrocinadores.org/2015/07/propiedades-medicinales-de-la-miel-revision-de-revisiones/